“Trump, escucha – estamos en la lucha”, gritaban cientos de personas envueltas en las banderas de sus países, cuya pasión superó las temperaturas frías el sábado, 8 de febrero en el parque de La Villita, Chicago.
El grupo se reunió a la una de la tarde para protestar contra las deportaciones recientes de la administración del presidente Donald Trump. A las dos de la tarde empezaron su marcha de casi 2 millas hacia la Plaza Memorial de Manuel Pérez Jr., donde seguían gritando y ondeando banderas de sus países de origen. También llevaban carteles hechos a mano con frases como “no muerdas las manos que te alimentan” y “conoce tus derechos si llega la migra”.
Byron Sigcho López, concejal del distrito 25, dijo que la protesta se organizó en La Villita, porque recientemente ha sido un blanco de “ataques” de la policía de inmigración.
“Un grupo de jóvenes de la comunidad se organizaron para proteger a sus vecinas y vecinos”, dijo López. “Y les agradezco que esos jóvenes han estado organizándose por algunas semanas ya, y que bueno ver gente, a pesar del frío aquí”.
Unas personas andaban repartiendo hojas con información acerca de derechos, algo que Francisco Villaseñor, quien vive en La Villita, apreció. La hoja les informa de qué hacer si interactúan con agentes de la policía de inmigración, como si vienen a su casa, en público etc.
“Creo que es importante que la gente tenga la habilidad de entender cuáles son realmente sus derechos”, dijo Villaseñor. “Hay mucha desinformación, ya sean personas que tienen la mejor intención, u otra gente que están tratando activamente a difundir esa desinformación”.
Mucha gente aceptaba las hojas de derechos, como la multitud incluía migrantes e inmigrantes que a veces ponían en riesgo su seguridad al protestar. Jesús Guerrero, del norte de Chicago, llegó a los Estados Unidos hace casi 40 años. Dijo que vino a la protesta sin miedo de representar lo que significa ser inmigrante.
“Miedo? Para nada”, Guerrero dijo. “Miedo no existe aquí en este corazón, aquí lo que tenemos es mucha valentía, mucho orgullo, y no tenemos miedo a nadie. Aquí tenemos derechos, todos en este país que hemos construído con el árbol de inmigrantes”.
Otros, como Aurora Maldonado, de La Villita, vino con miedo por su seguridad y estatus de inmigrante. Pero su devoción a participar la llevó a protestar con su comunidad.
“Sí, hemos tenido temor por todo lo que está pasando con las redadas”, Maldonado dijo. “[Pero] tenemos que unirnos, como pueblo, como vecinos, para estar en la lucha”.
Luis Calderón ayudó a liderar la marcha, impulsado por el sentido de comunidad que se creó por la multitud.
“Estamos en contra de la injusticia, y vamos a vencer con el amor, la paz, la organización y el respeto”, Calderón dijo. “Queremos mucho a los Estados Unidos, porque aquí están nuestras familias. De aquí somos, y no nos vamos”.
López dijo que el grupo también se unió en honor de un miembro de la comunidad, quién fue detenido sin antecedentes penales. La comunidad en la manifestación se unió tanto para ayudar a su vecino, como asegurarse que eso no sucediera de nuevo a ellos.
“Vamos nosotros a seguir informándonos, pero también es importante movilizarnos para denunciar este tipo de ataques”, López dijo.
Guerrero espera para el mismo desenlace de la protesta, de ayudar a difundir el mensaje de “respetar la dignidad de los inmigrantes”, y recordar a la sociedad lo que significa ser inmigrante.
“Estamos mandando un mensaje al nuevo presidente Trump, y recordarle a él y toda la administración, de que este país es un país de inmigrantes”, Guerrero dijo. “Queremos aclarar [que] no somos criminales. Somos gente trabajadora, que tenemos orgullo y dignidad de ser de todas partes del mundo”.
Copia editada por Manuel Nocera
English Digest:
Hundreds of residents of the Little Village community gathered on Saturday, Jan. 8 at 1 p.m. to march from the neighborhood park La Villita Park to the Manuel Peréz Jr. Plaza to protest recent deportations and ICE raids under the Trump administration. Francisco Villaseñor, from Little Village, said attending the protest was one of the best ways to show support for the community.
“It’s been really beautiful, seeing how people are organizing all over the country, all over the world,” he said.
Digest by Sofía Oyarzún
Copy edited by Manuel Nocera