PILSEN – A las 8 de la mañana del sábado 28 de octubre arrancó la Carrera de los Muertos, una celebración que honra la vida y la cultura mexicana.
La carrera de cinco kilómetros es organizada por United Neighborhood Organization (UNO) con el fin de recaudar fondos para el programa de GirlsMPowered. A través de los años y celebrando su decimosexto aniversario, esta competencia ha ganado popularidad convirtiéndose en una tradición familiar y en una oportunidad para rendir homenaje a los seres queridos de los participantes que han fallecido.
Con más de 3,000 personas caminando o corriendo, las calles del vecindario se adornaron con catrinas, calaveras, coronas florales, y playeras verde olivo que los participantes de todas las edades llevaban con orgullo al cumplir esta meta, al igual que la medalla que se les entregó al finalizar la carrera.
Felizmente caminaba el Chapulín Colorado, el disfraz que Víctor Flores de 41 años llevaba puesto y quien participó por primera vez.
“El Chapulín es un personaje de nuestra cultura y para mí es un honor poder seguirle dando vida a esos personajes del pasado”, dijo Flores. “[Es] como un tributo para, ‘uno que ya se nos fue’. Como un honor para ellos que nos hicieron reír muchos años”.
El popular personaje del Chapulín Colorado fue creado por el comediante mexicano Roberto Gómez Bolaños, quien falleciera en el 2014.
Entre risas y comentarios de orgullo, un grupo de amigas corría a un restaurante para desayunar. Entre ellas, María Rodríguez, originaria de la Ciudad de México, contó que participó por su hija, Alexa. Ella cree que esta carrera es una celebración que llegará muy lejos por todo el empeño que la gente le pone.
“Es importante traer la cultura a nuestros hijos y saber que es un día especial para los latinos. Y que después de la muerte hay vida”, dijo Rodríguez.
Para la familia Cevallos, participar en esta carrera se ha convertido en una tradición familiar y ya llevan diez años formando parte de ella. Cada año, Raquel Cevallos y sus hijos Carlos y Krystal culminan con una foto grupal como recuerdo anual. A Raquel le encanta ver a tantas personas que se unen a un evento como este, con mariachis en vivo y llevando disfraces.
“Para que traigamos conciencia sobre la cultura que estamos celebrando… Entonces es divertido que a través de esto podamos educar a otras personas que no son de la misma raza que nosotros, a que también vengan a celebrar, ¡es divertido! Somos divertidos”.
Sandra Becerra hizo su debut en el 2017. “Disfruto correr pero creo que es un gran evento para conmemorar a nuestros seres queridos, especialmente porque sucede cerca de la fecha del día de los muertos”, dijo Becerra con una sonrisa. “El segundo año que corrí, un día antes de la carrera, me enteré que estaba embarazada y logré cumplir con lo que me propuse, de correr. Hoy comencé 30 minutos tarde pero aún así lo logré. Siento que siempre pasa algo conmigo durante esta carrera, pero lo que importa es que logro disfrutar, vivir la experiencia y cumplir la meta”.
Con una bebida caliente en mano, la familia Lagunas celebraba después de haber corrido los cinco kilómetros. Arely Lagunas, junto con dos de sus tres hijos—Joaquín de 12 años y Noel de 7— traían puestas sus medallas.
Para Arely, quien lleva desde el 2016 participando en este evento, correr es más que un estilo de vida. Es algo que puede compartir con sus hijos y competencias como éstas los une más.
“Para nosotros, esta carrera ya es una tradición que esperamos; nos preparamos y sabemos que al final de la meta comemos pan y tomamos una bebida caliente”. Agrega, “es una carrera de nuestra cultura, donde sí pertenecemos”.
Michelle Rojas se levantó a las 6 de la mañana, no para correr sino para apoyar a sus amigos Mayra Bruno, Daisy Vinazaca y Christian Guzmán durante la carrera. “Soy una buena amiga, asegúrate de incluir eso en la historia”, dijo riendo. “Es una manera donde yo me puedo conectar con mi cultura, con mis raíces… Todos llegan con una sonrisa y sus disfraces; es una bonita manera para que todos se reúnan”.